v-shape
Mente & Corpore Sano
ATAQUE MULTIANGULAR DE HOMBROS
Por Dan Smith
Fotos Irvin Gelb
Si la articulación del hombro es la única que puede actuar en un ángulo de 360º, ¿por qué puede alguien pensar que es posible desarrollar los deltoides completamente con sólo dos o tres ejercicios?
Si este grupo muscular ha de dar movilidad a una articulación tan compleja, es lógico pensar que necesite ser estimulado desde diferentes ángulos para poder serlo por completo.
La mayoría no entrena suficiente esta zona, por miedo a sobreentrenarla o por falta de convicción en sus propias posibilidades.
Brett Becker no es de estos, por eso sus hombros son sencillamente excepcionales.
¿Os habéis parado a pensar que casi todo vuelve? Se diría que nos movemos en ciclos que van y vienen constantemente. La última moda con frecuencia no es más que una anterior presentada de nuevo. Buena parte de la música que triunfa ahora es la de hace unas décadas, con arreglos actuales. Vuelven las viejas películas con nuevas versiones, así como las originales, las viejas canciones y regresan hasta los discos de vinilo.
En el culturismo pasa algo parecido. El deporte suele ir también bastante de la mano de la moda que suele imponer el campeón de turno, en este caso el Mr Olympia.
Cuando Arnold reinaba todo el mundo se entrenaba como él, tras el Roble vinieron distintos Mr Olympia, pero éstos tal vez porque reinaron muy poco tiempo, no tuvieron el impacto que tuvo el desaparecido Mike Mentzer que estuvo en lo alto de la ola después del retiro de Arnold, aunque Mike no ganase el Olympia, y puso de moda entrenarse muy breve y duro. Lee Haney era de la vieja escuela, pero su sucesor Dorian se acercaba a las tesis de Mentzer. El caso es que llevamos casi dos décadas en las que la moda es entrenar muy poco por miedo al fantasma más aterrador del culturista: el sobreentrenamiento.
Según esta tendencia éste es la causa de que los culturistas no crezcan e incluso de que pierdan masa muscular. Y en base a ese temor se han ido reduciendo las rutinas cada vez más, hasta acabar con programas patéticos, en los que se intenta entrenar un grupo muscular únicamente con un par de series.
El problema es que cuando no crecen con eso enseguida deducen que carecen de la genética para ponerse grandes y abandonan, se resignan o lo que es peor, recurren a los esteroides.
Los campeones de hace tres y cuatro décadas entrenaban muy duro y a menudo dos veces al día y estaban muy grandes y fuertes sin recurrir a ningún tipo de ayuda química. Sencillamente entrenaban muy duro y comían mucho, nada más. Y no se daba tanta importancia al sobreentrenamiento como ahora. Si no crecían era o porque no entrenaban lo necesario o porque no comían lo suficiente.
Expertos como John Parrillo han manifestado en más de una ocasión que el famoso síndrome del sobreentrenamiento no es más que el resultado de la subalimentación.
Puede que antes no se hubiesen hecho estudios al respecto, pero ahora ya existen algunos interesantes que pueden consultarse a este respecto.
Lo cierto es que en uno se sometió a un grupo de atletas a un entrenamiento de sólo tres series por ejercicio, llevando cada serie al fallo absoluto, y a otro a diez series, pero sin llegar al fallo y los resultados fueron que el último grupo desarrolló más masa muscular en el mismo periodo de tiempo que el primero.
Creo que en nuestros días los culturistas naturales deberían hacer un planteamiento y revisar sus conceptos de ejercicio y dieta, elevando sobre todo sus expectativas.
En pocas palabras, deberían seguir el ejemplo de Brett Becker, un culturista natural excepcional que hace de 20 a 25 series por grupo muscular y está creciendo como la mala hierba.
Dejó el balón por las pesas y barras
Brett nació en la ciudad de San Louis, Missouri, EEUU, acaba de cumplir los 31 años y hace poco ganó la categoría del peso pesado en los Junior Nationals de 2005. Ahora se le puede con toda justicia considerar un culturista con un brillante futuro ante sí, pero inicialmente este hombre iba para futbolista.
Incluso llegó a jugar en la liga de primera división en la Universidad Estatal desde 1992 hasta 1996.
Aunque en Estados Unidos el fútbol europeo no goza de la popularidad que tiene el de estilo americano, Brett era un jugador con bastantes cualidades.
Tenía13 años cuando por vez primera se enfrentó a los hierros en busca de mejorar el rendimiento en el terreno de juego, pero durante años sólo lo vio como una ayuda, así que su entrenamiento no era serio ni regular.
A pesar de eso con 18 años comenzó a tomárselo seriamente, y pronto se convirtió en el más musculoso del equipo y poco a poco las pesas fueron ganando su favor, hasta el punto que con 25 años colgó definitivamente las botas de futbolista y se subió por primera vez a un escenario culturista.
Mientras tanto, al margen de su actividad deportiva, Brett se licenció en ciencias de enfermería y actualmente trabaja como enfermero diplomado.
Cuando jugaba a fútbol pesaba unos 70 kilos, ahora mide 1,72 metros y pesa 110 kilos fuera de temporada y 99 en competición, sus mediadas son 142 centímetros de pecho, 50 de brazos, 80 de cintura, 73 de muslo, 45 de gemelo y 48 de cuello.
No está nada mal, pero Brett nos recuerda que esas medidas son el resultado de 15 años de entrenamiento asiduo y como él dice... “Roma no se hizo en un día”.
Su filosofía de entrenamiento
Lejos de pensar que actualmente entrena demasiado Brett confiesa que antes sí que lo hacía en exceso, mientras que ahora ha encontrada la forma idónea.
“Antes entrenaba demasiado. Creo que durante bastante tiempo me estuve sobreentrenando, pero ese ya no es el caso. Me adhiero a los ejercicios básicos de siempre, que son los eficaces y descanso todo lo que puedo”.
Sin embargo, eso no significa que cada grupo sea tratado con un par de series, Brett realiza del orden de 20 a 25 series por grupo muscular, y él asegura que eso no es sobreentrenar.
Se ejercita cinco días por semana, descansando los miércoles y domingos y generalmente cada sesión sólo ataca un único grupo, con excepción de los hombros que actualmente sólo trabaja cada dos semanas para evitar que se vayan de proporción, eso sí le corresponden como a los demás 20-25 series.
Para cada grupo efectúa del orden de cuatro a cinco ejercicios distintos y realiza entre cuatro y seis series de cada uno.
Las repeticiones oscilan entre las 5 de una serie pesada y las 12 de una ligera. Siempre aplica el sistema de pirámide y conforme aumenta el peso en cada serie sucesiva, disminuye el número de repeticiones.
Brett considera que con menos ejercicio no podría crecer.
“Siempre ataco un grupo desde diferentes ángulos con ejercicios básicos, cuya eficacia está demostrada por los años, y luego lo dejo crecer. Hay que saturar el músculo y dejarlo regenerarse. Siempre pasan siete días antes de volverlo a entrenar. Además, como sólo entreno un grupo al día, lo abordo fresco y repleto de energías, acabo pronto y enseguida abandono el gimnasio. Hacer 20-25 series me toman como mucho tres cuartos de hora”.
Brett no tiene ningún grupo subdesarrollado, pero sí tiene algunas zonas destacables, desde luego entre estas sobresalen los hombros, porque son redondos y gruesos como balones, y además fuertes. Pero no lo son por azar, sino porque los trabaja desde todos los ángulos.
Ataque multiangular de hombros
No es comprensible que se pretenda desarrollar por completo los hombros con dos o tres ejercicios, cuando este grupo actúa moviendo la articulación en 360º. Cada movimiento en un ángulo concreto afecta a una franja muscular distinta y en diferente grado, por eso si la variedad es necesaria en cualquier músculo para desarrollarlo completamente, lo es doblemente en el caso de los hombros.
Por eso Brett realiza un mínimo de cinco ejercicios para los deltoides, dos para las tres cabezas en general y uno para cada una por separado.
Sin embargo, con frecuencia varía esos movimientos y los sustituye por otros, porque como él dice, los hombros permiten infinidad de ángulos, y por consiguiente de ejercicios diferentes. Aquí la variedad lo es todo.
He aquí la batería de ejercicios con los que ataca los hombros:
Press militar en aparato Smith
Este suele ser uno de los dos ejercicios básicos que emplea como constructor de las tres cabezas del deltoides.
Durante algún tiempo estuvo haciendo la versión tras nuca, pero en cuanto superaba un poco un peso medio sentía molestias en la articulación... “Creo que es un ejercicio que pone excesiva tensión sobre los rotadores del hombro y en cuanto abandoné esa versión y desaparecieron las molestias”.
Brett se inclina por hacer el movimiento en el aparato Smith porque así se olvida del equilibrio y puede centrarse en subir y bajar el peso sin más.
La barra pasa por delante de la cara, pero echa la cabeza hacia atrás para que ésta suba en una línea lo más recta posible con los hombros. El recorrido es largo, pero en la parte final Brett se asegura de no bloquear del todo los codos, es decir desciende antes de que estos se estiren del todo. “Puesto que la barra guiada no implica riesgo de desequilibrio, ni cambio de la trayectoria, empujo con la cara externa de la mano y sin implicar al pulgar en el agarre y de esa forma traslado más la tensión hacia la cabeza lateral y posterior”. De cualquier forma, la anterior se lleva una buena parte del estímulo.
Brett realiza cuatro series en las que va subiendo el peso y reduciendo el número de repeticiones, desde 12 a 6.
Press con mancuernas
Este es otro de sus favoritos para desarrollar las tres cabezas, o sea otro básico. Brett lo ejecuta sentado y preferiblemente con apoyo para la espalda. Coge dos mancuernas y las lleva hasta la altura de los hombros, luego desde ese punto el ejercicio comienza sencillamente elevándolas hasta casi la plena extensión de los brazos. Este es un movimiento en el que no se complica y por eso le permite mover mucho peso, utilizando en cada serie sucesiva unas pesas más grandes. Las baja lentamente hasta que tocan el hombro y marca una leve pausa antes de subirlas de nuevo.
Press con mancuernas y giro
En ocasiones Brett realiza otro tipo de press con mancuernas, el press con giro. Algunos lo llaman el press Arnold y otros le achacan la invención del movimiento al primer Mr Olympia, Larry Scott.
De cualquier forma es un ejercicio excepcional para hacer arder los hombros y obligarlos a crecer. El peso que se puede mover es menor que en el ejercicio anterior, pero vale la pena.
El inicio del ejercicio difiere del press clásico porque en lugar de empezar con las palmas hacia delante, éstas están mirando al cuerpo, con los nudillos hacia delante y frente al pecho, no a los hombros. Desde esa posición, se elevan al tiempo que se giran para que al llegar arriba las palmas estén mirando hacia el frente y al bajar se invierte la rotación para volver a acabar con las palmas de las manos mirando al pecho. Pero Brett, ha creado su propio estilo en este ejercicio.
“Empecé haciéndolo así y aunque permite mover menos peso, los hombros trabajan al 110% y arden como brasas, pero todavía lo he perfeccionado, o complicado. Acabé realizándolo así sencillamente porque conforme avanzaban las repeticiones y el cansancio se acentuaba, las pesas bajaban más y me costaba detenerlas a la altura del pecho, y éstas bajaban más. Desde más abajo era mucho más duro volver a elevarlas, así que los hombros ardían más, pero también se desarrollaban mejor. Así que terminé por empezar el press con las mancuernas casi sobre los muslos y desde ahí las elevo y las voy girando hasta llegar arriba con las manos encaradas al frente”.
Probadlo con poco peso, sentiréis brasas dentro de vuestros hombros.
Press a un brazo
En ocasiones, para rematar o para congestionar a tope, opta por el press a un brazo. En este caso busca un punto de apoyo para la mano que no interviene y para estabilizar el cuerpo, mientras sube y baja la mancuerna de la forma convencional. A veces mueve mucho peso porque al estar de pie puede ayudarse con un poco de impulso al flexionar las rodillas.
Remo al mentón
Aparte de los ejercicios de press como básicos para desarrollar las tres cabezas, también recurre al remo alto para ese fin.
Este ejercicio además de afectar a los hombros también implica muy directamente a los trapecios, más que los demás movimientos de deltoides que también lo hacen, pero es un gran constructor de masa general en la zona clavicular en general. Sin embargo, aunque no se elimina del todo la intervención de los trapecios, sí que cuando se efectúa con una mayor amplitud de las manos en el agarre usado, la acción cobra más protagonismo hacia los deltoides que son los que mayormente se contraen para subir el peso.
Observad que los codos han de ir siempre por encima de la barra.
Elevaciones laterales
Ahora ya entramos en los ejercicios propios de cada franja del hombro. Las elevaciones laterales constituyen el mejor movimiento para afectar a la cabeza lateral.
Brett prefiere las mancuernas que los cables, porque siente trabajar el músculo mejor.
Procura mover mucho peso, siempre y cuando no tenga que balanzearse en exceso para elevarlas. Con frecuencia busca apoyo para estabilizar el cuerpo y que el movimiento sea más puro. Sin embargo, hay un gesto que siempre hace... “Para minimizar la implicación que pueda tener la cara anterior del deltoides, procuro inclinar un poco el tronco hacia delante y así desvío toda la tensión hacia la parte lateral”.
Arranca el peso con fuerza pero manteniendo el tronco inmóvil mientras sube y baja con control.
Cinco suelen ser las series que efectúa aquí hasta que ve que la redondez del hombro es palpable.
Elevaciones laterales a un brazo
Otro ejercicio para la misma zona es la elevación lateral a un solo brazo. Como cuando hace el press a un brazo, Brett busca apoyo en alguna estructura de modo que su cuerpo se estabilice. Desde ese punto eleva y desciende la mancuerna mirando siempre hacia el suelo, pero sube ésta por encima del nivel del hombro, consiguiendo así una contracción máxima del músculo.
Aquí no usa mucho peso, sino que busca apretar el deltoides en la parte superior. Cuatro series de 8 a 10 repeticones.
Elevaciones laterales con polea
El mismo ejercicio también forma parte de su arsenal empleando la polea baja.
La ejecución es exactamente la misma que con la mancuerna, apretando en el punto alto y subiendo la mano más allá de la altura del hombro. La única diferencia es que gracias a la tensión que ejerce el cable sin tener en cuenta la fuerza de la gravedad del agarre, la mano empieza por delante del cuerpo, desde el lado opuesto.
Elevaciones frontales alternadas
Ahora le toca a la franja frontal del deltoides, una que la mayoría descuida aludiendo que ésta ya toma parte en muchos otros ejercicios. Brett no es de esa opinión y también le dedica un trabajo directo.
La realización de las elevaciones frontales alternadas es muy simple. Brett parte con las mancuernas delante de los muslos y desde esa posición eleva un brazo con la palma mirando al suelo hasta que llega a la altura del hombro y luego lo baja lentamente hasta tocar de nuevo el muslo, sólo entonces eleva el otro brazo para hacer el mismo recorrido.
Cuatro son las series de 10 repeticiones por brazo.
Elevaciones frontales con una mancuerna
También aquí hay cambios y alternativas. La elevación frontal puede hacerse sosteniendo una mancuerna con ambas manos. Evidentemente la carga empleada es mayor, pero el recorrido es básicamente el mismo, aunque también aquí Brett tiene un giro personal, ya que sostiene la mancuerna con el dorso de las manos, especialmente durante la bajada, porque insiste en que así siente más la acción sobre los deltoides frontales.
Elevaciones laterales inclinado
Ahora le toca el turno a la cabeza posterior del hombro. Brett se adhiere al ejercicio clásico para esta zona: las elevaciones laterales inclinado.
Se inclina por la cintura hacia delante mientras sostiene una mancuerna en cada mano, luego las eleva lateralmente hasta que los codos alcanzan la altura de los hombros y ahí los aprieta antes de descender. Cinco series de 12 a 8 repeticiones hacen que los deltoides posteriores asomen como dos pelotas de tenis bajo la piel.
Pájaros en polea
Ese mismo ejercicio también cuenta con la versión en polea. Para llevarlo a efecto Brett se sitúa entre dos poleas, se dobla por la cintura y coge un agarre inferior con cada mano, con la derecha el que sale de la polea izquierda y con la izquierda el que sale de la derecha.
Ahora los brazos están cruzados por delante del cuerpo, porque cada cable tira de ellos en sentido opuesto. La elevación es exactamente igual, llegando hasta que los codos alcanzan el nivel de los hombros y reteniéndolos allí por un segundo.
Cuatro series de 10 a 12 repeticiones dejan los hombros de Brett Becker fritos por completo.
La alimentación es la piedra angular de todo programa
Brett afirma: “Para mí la nutrición es esencial en culturismo, puesto que supone hasta el 90% del aspecto que se puede llegar a conseguir. Una buena dieta te puede construir o destruir. Los suplementos son asimismo importantes, pero sólo funcionan si la dieta es buena, porque de lo contrario servirán de muy poco”.
Antes durante la época de fuera de temporada Brett se permitía subir mucho de peso, porque seguía los sistemas clásicos y sabía que tenía que comer mucho para impulsar el crecimiento. Sin embargo, ahora ya ha adoptado otro enfoque en el que se mantiene todo el año en un peso más cercano al de competición para luego llegar a definirse más fácilmente y sin una dieta tan severa que ponga en peligro la masa muscular adquirida. Ahora sólo tiene que reducir un 10% de peso.
Su dieta se basa en grandes cantidades de proteínas y numerosas comidas durante el día.
“Es la única manera de llegar a tener el organismo en constante balance positivo de nitrógeno, para que la síntesis de proteínas puede tener lugar. Tomo muchos carbohidratos feculentos por la mañana y sólo fibrosos a partir de la tarde, pero la proteína siempre alta. También ingiero una pequeña cantidad de grasa buena y sobre todo bebo mucha agua”.
Brett consume bastante carne roja magra y pavo, así como huevos, en tanto que fuentes de proteínas. Los copos de avena, el arroz integral, los boniatos y las patatas, como hidratos de carbono y el aceite de lino, el MCT y los frutos secos como fuentes de grasas buenas. El salmón también cobra protagonismo destacado en su menú, puesto que proporciona proteínas y ácidos omega 3 a un tiempo.
Con 12-14 semanas de antelación a la fecha de una competición empieza a apretar la dieta para que los cambios sean paulatinos y graduales.
Primero aumenta el ejercicio cardiovascular, además de reducir las grasas y los carbohidratos, luego incrementa la ingestión de proteínas para compensar en parte las calorías eliminadas y conforme avanza la dieta y la definición, luego eleva de nuevo un poco los hidratos de carbono para llenar el músculo, y otra vez más las proteínas.
De hecho su objetivo es alcanzar la máxima definición antes de la fecha prevista, para que justo antes de la competición esté en una fase en la que las proteínas e hidratos estén al alza, porque así los músculos se verán más llenos y densos.
El secreto de un culturista natural
Brett sabe perfectamente que la dieta es el factor principal, después del entrenamiento, para que los músculos crezcan y muy especialmente cuando no se utilizan ayudas hormonales o químicas.
Para un culturista natural, toda ayuda que pueda mejorar la síntesis de nuevas proteínas tiene un valor incalculable. Por eso mismo es un fiel creyente y usuario de los ergocéuticos.
Las ayudas ergogénicas naturales han avanzado mucho con la creación de los ergocéuticos de Future Concepts.
La concepción de cada uno de ellos es muy meticulosa y está concebida para un objetivo concreto, para acelerar la síntesis de proteínas, para incrementar la absorción, para aumentar la producción hormonal, etcétera, por eso Brett atribuye a estos preparados gran parte de sus progresos.
Acelerar la síntesis de proteínas (anabolismo), e impedir su degradación (catabolismo)
Ya sabemos que el cuerpo necesita proteínas, carbohidratos, grasas, vitaminas, minerales y muchas otras sustancias para funcionar correctamente, pero cuando se trata de adquirir una masa magra superior eso no basta.
Por eso mismo Brett utiliza a lo largo del día el ergocéutico WP R10 de Future Concepts, porque contiene varias fuentes de proteínas altamente biológicas y de diferente ritmo de absorción, de esa forma éstas impiden el catabolismo y mantienen el balance de nitrógeno positivo a lo largo del día, o sea que potencian el anabolismo. Este ergocéutico también incluye grasas saludables y carbohidratos complejos de bajo índice glucémico.
Al mismo tiempo el WP R 10 cuenta con numerosas sustancias que favorecen la digestión, la absorción y hasta la mejor metabolización de las proteínas ingeridas, pero también otras que impiden la formación de grasa, así como elementos para aumentar la energía mental y sobre todo para elevar la producción hormonal.
Esta fórmula se consume entre horas para regular el metabolismo y mantenerlo en estado positivo de nitrógeno.
Sin embargo, después de cada sesión de entrenamiento Brett recurre al WP P11 que es una modificación del WP R10 pero adaptado específicamente para sacar provecho de las condiciones metabólicas tan particulares que se producen como consecuencia del entreno.
Es conocido que en esos momentos el cuerpo atraviesa un periodo transitorio, conocido como la ventana anabólica, en el cual se aceleran las funciones de absorción, reconstrucción y recuperación, por eso el WP P11 ha de usarse entonces, porque contiene todos los elementos óptimos para sacar el máximo de ese estado puntual. Con su empleo se acelera la construcción de tejido muscular, la formación de glucógeno, la reparación de los tejidos conjuntivos y articulares, la desintoxicación del hígado, el aumento de las hormonas anabólicas al tiempo que se impide la elevación de las catabólicas, esto último es de gran importancia porque sólo con frenar la subida del cortisol ya se da un gran paso adelante.
Ambos ergocéuticos aseguran la correcta alimentación y estabilizan la función endocrina.
Multiplicar la absorción
Mejorar la absorción puede tener más impacto sobre la ganancia de masa corporal que comer más, por eso Future Concepts ha desarrollado el único amplificador de la absorción que existe, el AB 18.
Una sola cápsula abre las puertas de la absorción metabólica durante horas. Tanta es su fuerza que está totalmente desaconsejado su empleo si se sigue medicación o se bebe alcohol, pues sus efectos equivaldrían a multiplicar las dosis.
Los componentes que forman este ergocéutico actúan en diversos frentes responsables de la absorción de las partículas a nivel de las paredes del intestino superior y del hígado. Con sólo dos cápsulas al día los progresos se notan de forma acusada.
Más fuerza y volumen por medio de la hidratación muscular
Se sabe que la hidratación permite rendir más en el deporte y por tanto es importante, sin embargo en el culturismo tiene una mayor repercusión, puesto que los músculos están compuestos en un 70% por agua, de manera que si se incrementa su hidratación es posible conseguir automáticamente un aumento considerable de la fuerza y del volumen musculares.
El CRS 086 de Future Concepts es un hidratador celular de gran eficacia porque su fórmula, desarrollada siguiendo protocolos científicos, es capaz de inundar el interior de las células musculares con agua produciendo con ello un considerable aumento del volumen y fuerza, pero además, y esto está científicamente demostrado, acelera la síntesis de proteínas dentro de la célula.
La meticulosa combinación de creatina, ribosa, taurina, glutamina, aminoácidos y electrolitos, hace que las células de los músculos absorban el agua en su interior, así como la creatina, los aminoácidos y otras sustancias, ganando con ello mucha fuerza y volumen y acelerando su desarrollo a corto y medio plazo.
Elevar la producción hormonal
La formación de nuevos tejidos necesita de un entorno hormonal propicio, que es posible mejorar bastante por medios naturales.
Las dos hormonas principales en funciones de anabolismo puro son la testosterona y la hormona del crecimiento humana.
Esta última tiene su máxima producción en el cuerpo por la noche, al poco de caer dormidos profundamente, por eso Future Concepts ha creado el GP 01 que se utiliza sólo antes de acostarse y contiene toda una serie de elementos que incrementan la secreción natural de hormona del crecimiento.
El ergocéutico GP 01 también incluye ciertas sustancias que ayudan a mantener elevados asimismo los niveles nocturnos de testosterona, por lo que con su uso se consigue extraer los máximos beneficios del reposo nocturno, un periodo altamente anabólico por excelencia.
Sin embargo, el TEST RF 05 es de uso exclusivo diurno y sus ingredientes, todos botánicos, afectan única y exclusivamente a la producción y metabolización de la testosterona, la hormona masculina.
Con este ergocéutico es posible elevar la producción diurna de ésta al tiempo que se consigue que sea más activa en el cuerpo.
“El uso de ambos ergocéuticos me ha proporcionado mucho músculo de calidad y fuerza”.
Dinamizar el metabolismo
El TH 101 es el único activador del metabolismo que existe. Sus ingredientes aportan los materiales indispensables a la formación de hormonas tiroideas, lo que permite que la glándula tiroides funcione correctamente.
Existen numerosas razones por las que el metabolismo puede ralentizarse, desde una deficiencia nutricional, dieta severa o agotamiento adrenal, y cuando eso sucede los progresos musculares decaen, así como la energía y se acumula la grasa con mayor facilidad.
Entre los compuestos que integran el TH 101 se encuentran diversas sustancias, todas naturales, que aumentan la termogénesis, es decir la producción de calor corporal, lo que conlleva un gasto calórico mayor que se obtiene de las grasas corporales de reserva.
Por tanto, con el empleo regular del TH 101 se proporciona un empujón al funcionamiento del metabolismo, cuyo regulador es la tiroides, al tiempo que se dispone de más energía para entrenar a expensas de la eliminación del tejido adiposo.
Maximizar la congestión y regeneración musculares
Todos los culturistas experimentados saben de sobras que la congestión muscular es el primer indicio de su capacidad de desarrollo. Miles han comprobado que aquellos grupos que se congestionan fácilmente siempre acaban creciendo más, y hoy conocemos la veracidad y mecánica de ese fenómeno.
Basándose en los estudios científicos más recientes, Future Concepts ha desarrollado el ergocéutico VM NOx2 con una serie de nuevos ingredientes que proporcionan unas congestiones tan brutales que parece que los músculos están a punto de hacer estallar la piel.
La excepcionalidad de este preparado es que las partículas que lo componen activan tres ejes fundamentales del crecimiento de los músculos: la circulación del óxido nítrico, la producción del factor de crecimiento similar a la insulina, el altamente anabólico IFG 1, y las células satélite del núcleo del músculo.
El resultado es que la química muscular se activa de tal manera, que entrenando duro, el crecimiento es mucho más rápido y acentuado que bajo ninguna otra circunstancia.
Deltoides asombrosos
Cuando Brett Becker ganó la categoría de peso pesado en el Junior Nationals de 2005 una de sus mejores armas fueron los hombros.
Anchos, redondos, gruesos y perfectamente dibujados en cada una de sus cabezas, sin lugar a dudas este grupo constituyó una buena baza en su favor.
Ese desarrollo tan excepcional es producto de un trabajo minucioso y suficiente, y sobre todo de la estimulación multiangular.
Si queréis llevar los hombros a una nueva dimensión, haced como Brett, dedicadle una sesión íntegra y suficientes series con ejercicios distintos, desde todos los ángulos. No os olvidéis de descansar lo suficiente y de comer en abundancia, así como de utilizar los ergocéuticos y en poco tiempo puede que vuestros hombros crezcan más de lo nunca creísteis posible.
Después de todo, si otros pueden, ¿por qué no vosotros?
Historial competitivo de Brett Becker
2001 Caveman Classic – 1º peso pesado ligero
2002 Junior Nationals – 9º peso pesado
2003 Junior Nationals – 2º peso pesado
2005 Junior Nationals – 1º peso pesado
Por Dan Smith
Fotos Irvin Gelb
Si la articulación del hombro es la única que puede actuar en un ángulo de 360º, ¿por qué puede alguien pensar que es posible desarrollar los deltoides completamente con sólo dos o tres ejercicios?
Si este grupo muscular ha de dar movilidad a una articulación tan compleja, es lógico pensar que necesite ser estimulado desde diferentes ángulos para poder serlo por completo.
La mayoría no entrena suficiente esta zona, por miedo a sobreentrenarla o por falta de convicción en sus propias posibilidades.
Brett Becker no es de estos, por eso sus hombros son sencillamente excepcionales.
¿Os habéis parado a pensar que casi todo vuelve? Se diría que nos movemos en ciclos que van y vienen constantemente. La última moda con frecuencia no es más que una anterior presentada de nuevo. Buena parte de la música que triunfa ahora es la de hace unas décadas, con arreglos actuales. Vuelven las viejas películas con nuevas versiones, así como las originales, las viejas canciones y regresan hasta los discos de vinilo.
En el culturismo pasa algo parecido. El deporte suele ir también bastante de la mano de la moda que suele imponer el campeón de turno, en este caso el Mr Olympia.
Cuando Arnold reinaba todo el mundo se entrenaba como él, tras el Roble vinieron distintos Mr Olympia, pero éstos tal vez porque reinaron muy poco tiempo, no tuvieron el impacto que tuvo el desaparecido Mike Mentzer que estuvo en lo alto de la ola después del retiro de Arnold, aunque Mike no ganase el Olympia, y puso de moda entrenarse muy breve y duro. Lee Haney era de la vieja escuela, pero su sucesor Dorian se acercaba a las tesis de Mentzer. El caso es que llevamos casi dos décadas en las que la moda es entrenar muy poco por miedo al fantasma más aterrador del culturista: el sobreentrenamiento.
Según esta tendencia éste es la causa de que los culturistas no crezcan e incluso de que pierdan masa muscular. Y en base a ese temor se han ido reduciendo las rutinas cada vez más, hasta acabar con programas patéticos, en los que se intenta entrenar un grupo muscular únicamente con un par de series.
El problema es que cuando no crecen con eso enseguida deducen que carecen de la genética para ponerse grandes y abandonan, se resignan o lo que es peor, recurren a los esteroides.
Los campeones de hace tres y cuatro décadas entrenaban muy duro y a menudo dos veces al día y estaban muy grandes y fuertes sin recurrir a ningún tipo de ayuda química. Sencillamente entrenaban muy duro y comían mucho, nada más. Y no se daba tanta importancia al sobreentrenamiento como ahora. Si no crecían era o porque no entrenaban lo necesario o porque no comían lo suficiente.
Expertos como John Parrillo han manifestado en más de una ocasión que el famoso síndrome del sobreentrenamiento no es más que el resultado de la subalimentación.
Puede que antes no se hubiesen hecho estudios al respecto, pero ahora ya existen algunos interesantes que pueden consultarse a este respecto.
Lo cierto es que en uno se sometió a un grupo de atletas a un entrenamiento de sólo tres series por ejercicio, llevando cada serie al fallo absoluto, y a otro a diez series, pero sin llegar al fallo y los resultados fueron que el último grupo desarrolló más masa muscular en el mismo periodo de tiempo que el primero.
Creo que en nuestros días los culturistas naturales deberían hacer un planteamiento y revisar sus conceptos de ejercicio y dieta, elevando sobre todo sus expectativas.
En pocas palabras, deberían seguir el ejemplo de Brett Becker, un culturista natural excepcional que hace de 20 a 25 series por grupo muscular y está creciendo como la mala hierba.
Dejó el balón por las pesas y barras
Brett nació en la ciudad de San Louis, Missouri, EEUU, acaba de cumplir los 31 años y hace poco ganó la categoría del peso pesado en los Junior Nationals de 2005. Ahora se le puede con toda justicia considerar un culturista con un brillante futuro ante sí, pero inicialmente este hombre iba para futbolista.
Incluso llegó a jugar en la liga de primera división en la Universidad Estatal desde 1992 hasta 1996.
Aunque en Estados Unidos el fútbol europeo no goza de la popularidad que tiene el de estilo americano, Brett era un jugador con bastantes cualidades.
Tenía13 años cuando por vez primera se enfrentó a los hierros en busca de mejorar el rendimiento en el terreno de juego, pero durante años sólo lo vio como una ayuda, así que su entrenamiento no era serio ni regular.
A pesar de eso con 18 años comenzó a tomárselo seriamente, y pronto se convirtió en el más musculoso del equipo y poco a poco las pesas fueron ganando su favor, hasta el punto que con 25 años colgó definitivamente las botas de futbolista y se subió por primera vez a un escenario culturista.
Mientras tanto, al margen de su actividad deportiva, Brett se licenció en ciencias de enfermería y actualmente trabaja como enfermero diplomado.
Cuando jugaba a fútbol pesaba unos 70 kilos, ahora mide 1,72 metros y pesa 110 kilos fuera de temporada y 99 en competición, sus mediadas son 142 centímetros de pecho, 50 de brazos, 80 de cintura, 73 de muslo, 45 de gemelo y 48 de cuello.
No está nada mal, pero Brett nos recuerda que esas medidas son el resultado de 15 años de entrenamiento asiduo y como él dice... “Roma no se hizo en un día”.
Su filosofía de entrenamiento
Lejos de pensar que actualmente entrena demasiado Brett confiesa que antes sí que lo hacía en exceso, mientras que ahora ha encontrada la forma idónea.
“Antes entrenaba demasiado. Creo que durante bastante tiempo me estuve sobreentrenando, pero ese ya no es el caso. Me adhiero a los ejercicios básicos de siempre, que son los eficaces y descanso todo lo que puedo”.
Sin embargo, eso no significa que cada grupo sea tratado con un par de series, Brett realiza del orden de 20 a 25 series por grupo muscular, y él asegura que eso no es sobreentrenar.
Se ejercita cinco días por semana, descansando los miércoles y domingos y generalmente cada sesión sólo ataca un único grupo, con excepción de los hombros que actualmente sólo trabaja cada dos semanas para evitar que se vayan de proporción, eso sí le corresponden como a los demás 20-25 series.
Para cada grupo efectúa del orden de cuatro a cinco ejercicios distintos y realiza entre cuatro y seis series de cada uno.
Las repeticiones oscilan entre las 5 de una serie pesada y las 12 de una ligera. Siempre aplica el sistema de pirámide y conforme aumenta el peso en cada serie sucesiva, disminuye el número de repeticiones.
Brett considera que con menos ejercicio no podría crecer.
“Siempre ataco un grupo desde diferentes ángulos con ejercicios básicos, cuya eficacia está demostrada por los años, y luego lo dejo crecer. Hay que saturar el músculo y dejarlo regenerarse. Siempre pasan siete días antes de volverlo a entrenar. Además, como sólo entreno un grupo al día, lo abordo fresco y repleto de energías, acabo pronto y enseguida abandono el gimnasio. Hacer 20-25 series me toman como mucho tres cuartos de hora”.
Brett no tiene ningún grupo subdesarrollado, pero sí tiene algunas zonas destacables, desde luego entre estas sobresalen los hombros, porque son redondos y gruesos como balones, y además fuertes. Pero no lo son por azar, sino porque los trabaja desde todos los ángulos.
Ataque multiangular de hombros
No es comprensible que se pretenda desarrollar por completo los hombros con dos o tres ejercicios, cuando este grupo actúa moviendo la articulación en 360º. Cada movimiento en un ángulo concreto afecta a una franja muscular distinta y en diferente grado, por eso si la variedad es necesaria en cualquier músculo para desarrollarlo completamente, lo es doblemente en el caso de los hombros.
Por eso Brett realiza un mínimo de cinco ejercicios para los deltoides, dos para las tres cabezas en general y uno para cada una por separado.
Sin embargo, con frecuencia varía esos movimientos y los sustituye por otros, porque como él dice, los hombros permiten infinidad de ángulos, y por consiguiente de ejercicios diferentes. Aquí la variedad lo es todo.
He aquí la batería de ejercicios con los que ataca los hombros:
Press militar en aparato Smith
Este suele ser uno de los dos ejercicios básicos que emplea como constructor de las tres cabezas del deltoides.
Durante algún tiempo estuvo haciendo la versión tras nuca, pero en cuanto superaba un poco un peso medio sentía molestias en la articulación... “Creo que es un ejercicio que pone excesiva tensión sobre los rotadores del hombro y en cuanto abandoné esa versión y desaparecieron las molestias”.
Brett se inclina por hacer el movimiento en el aparato Smith porque así se olvida del equilibrio y puede centrarse en subir y bajar el peso sin más.
La barra pasa por delante de la cara, pero echa la cabeza hacia atrás para que ésta suba en una línea lo más recta posible con los hombros. El recorrido es largo, pero en la parte final Brett se asegura de no bloquear del todo los codos, es decir desciende antes de que estos se estiren del todo. “Puesto que la barra guiada no implica riesgo de desequilibrio, ni cambio de la trayectoria, empujo con la cara externa de la mano y sin implicar al pulgar en el agarre y de esa forma traslado más la tensión hacia la cabeza lateral y posterior”. De cualquier forma, la anterior se lleva una buena parte del estímulo.
Brett realiza cuatro series en las que va subiendo el peso y reduciendo el número de repeticiones, desde 12 a 6.
Press con mancuernas
Este es otro de sus favoritos para desarrollar las tres cabezas, o sea otro básico. Brett lo ejecuta sentado y preferiblemente con apoyo para la espalda. Coge dos mancuernas y las lleva hasta la altura de los hombros, luego desde ese punto el ejercicio comienza sencillamente elevándolas hasta casi la plena extensión de los brazos. Este es un movimiento en el que no se complica y por eso le permite mover mucho peso, utilizando en cada serie sucesiva unas pesas más grandes. Las baja lentamente hasta que tocan el hombro y marca una leve pausa antes de subirlas de nuevo.
Press con mancuernas y giro
En ocasiones Brett realiza otro tipo de press con mancuernas, el press con giro. Algunos lo llaman el press Arnold y otros le achacan la invención del movimiento al primer Mr Olympia, Larry Scott.
De cualquier forma es un ejercicio excepcional para hacer arder los hombros y obligarlos a crecer. El peso que se puede mover es menor que en el ejercicio anterior, pero vale la pena.
El inicio del ejercicio difiere del press clásico porque en lugar de empezar con las palmas hacia delante, éstas están mirando al cuerpo, con los nudillos hacia delante y frente al pecho, no a los hombros. Desde esa posición, se elevan al tiempo que se giran para que al llegar arriba las palmas estén mirando hacia el frente y al bajar se invierte la rotación para volver a acabar con las palmas de las manos mirando al pecho. Pero Brett, ha creado su propio estilo en este ejercicio.
“Empecé haciéndolo así y aunque permite mover menos peso, los hombros trabajan al 110% y arden como brasas, pero todavía lo he perfeccionado, o complicado. Acabé realizándolo así sencillamente porque conforme avanzaban las repeticiones y el cansancio se acentuaba, las pesas bajaban más y me costaba detenerlas a la altura del pecho, y éstas bajaban más. Desde más abajo era mucho más duro volver a elevarlas, así que los hombros ardían más, pero también se desarrollaban mejor. Así que terminé por empezar el press con las mancuernas casi sobre los muslos y desde ahí las elevo y las voy girando hasta llegar arriba con las manos encaradas al frente”.
Probadlo con poco peso, sentiréis brasas dentro de vuestros hombros.
Press a un brazo
En ocasiones, para rematar o para congestionar a tope, opta por el press a un brazo. En este caso busca un punto de apoyo para la mano que no interviene y para estabilizar el cuerpo, mientras sube y baja la mancuerna de la forma convencional. A veces mueve mucho peso porque al estar de pie puede ayudarse con un poco de impulso al flexionar las rodillas.
Remo al mentón
Aparte de los ejercicios de press como básicos para desarrollar las tres cabezas, también recurre al remo alto para ese fin.
Este ejercicio además de afectar a los hombros también implica muy directamente a los trapecios, más que los demás movimientos de deltoides que también lo hacen, pero es un gran constructor de masa general en la zona clavicular en general. Sin embargo, aunque no se elimina del todo la intervención de los trapecios, sí que cuando se efectúa con una mayor amplitud de las manos en el agarre usado, la acción cobra más protagonismo hacia los deltoides que son los que mayormente se contraen para subir el peso.
Observad que los codos han de ir siempre por encima de la barra.
Elevaciones laterales
Ahora ya entramos en los ejercicios propios de cada franja del hombro. Las elevaciones laterales constituyen el mejor movimiento para afectar a la cabeza lateral.
Brett prefiere las mancuernas que los cables, porque siente trabajar el músculo mejor.
Procura mover mucho peso, siempre y cuando no tenga que balanzearse en exceso para elevarlas. Con frecuencia busca apoyo para estabilizar el cuerpo y que el movimiento sea más puro. Sin embargo, hay un gesto que siempre hace... “Para minimizar la implicación que pueda tener la cara anterior del deltoides, procuro inclinar un poco el tronco hacia delante y así desvío toda la tensión hacia la parte lateral”.
Arranca el peso con fuerza pero manteniendo el tronco inmóvil mientras sube y baja con control.
Cinco suelen ser las series que efectúa aquí hasta que ve que la redondez del hombro es palpable.
Elevaciones laterales a un brazo
Otro ejercicio para la misma zona es la elevación lateral a un solo brazo. Como cuando hace el press a un brazo, Brett busca apoyo en alguna estructura de modo que su cuerpo se estabilice. Desde ese punto eleva y desciende la mancuerna mirando siempre hacia el suelo, pero sube ésta por encima del nivel del hombro, consiguiendo así una contracción máxima del músculo.
Aquí no usa mucho peso, sino que busca apretar el deltoides en la parte superior. Cuatro series de 8 a 10 repeticones.
Elevaciones laterales con polea
El mismo ejercicio también forma parte de su arsenal empleando la polea baja.
La ejecución es exactamente la misma que con la mancuerna, apretando en el punto alto y subiendo la mano más allá de la altura del hombro. La única diferencia es que gracias a la tensión que ejerce el cable sin tener en cuenta la fuerza de la gravedad del agarre, la mano empieza por delante del cuerpo, desde el lado opuesto.
Elevaciones frontales alternadas
Ahora le toca a la franja frontal del deltoides, una que la mayoría descuida aludiendo que ésta ya toma parte en muchos otros ejercicios. Brett no es de esa opinión y también le dedica un trabajo directo.
La realización de las elevaciones frontales alternadas es muy simple. Brett parte con las mancuernas delante de los muslos y desde esa posición eleva un brazo con la palma mirando al suelo hasta que llega a la altura del hombro y luego lo baja lentamente hasta tocar de nuevo el muslo, sólo entonces eleva el otro brazo para hacer el mismo recorrido.
Cuatro son las series de 10 repeticiones por brazo.
Elevaciones frontales con una mancuerna
También aquí hay cambios y alternativas. La elevación frontal puede hacerse sosteniendo una mancuerna con ambas manos. Evidentemente la carga empleada es mayor, pero el recorrido es básicamente el mismo, aunque también aquí Brett tiene un giro personal, ya que sostiene la mancuerna con el dorso de las manos, especialmente durante la bajada, porque insiste en que así siente más la acción sobre los deltoides frontales.
Elevaciones laterales inclinado
Ahora le toca el turno a la cabeza posterior del hombro. Brett se adhiere al ejercicio clásico para esta zona: las elevaciones laterales inclinado.
Se inclina por la cintura hacia delante mientras sostiene una mancuerna en cada mano, luego las eleva lateralmente hasta que los codos alcanzan la altura de los hombros y ahí los aprieta antes de descender. Cinco series de 12 a 8 repeticiones hacen que los deltoides posteriores asomen como dos pelotas de tenis bajo la piel.
Pájaros en polea
Ese mismo ejercicio también cuenta con la versión en polea. Para llevarlo a efecto Brett se sitúa entre dos poleas, se dobla por la cintura y coge un agarre inferior con cada mano, con la derecha el que sale de la polea izquierda y con la izquierda el que sale de la derecha.
Ahora los brazos están cruzados por delante del cuerpo, porque cada cable tira de ellos en sentido opuesto. La elevación es exactamente igual, llegando hasta que los codos alcanzan el nivel de los hombros y reteniéndolos allí por un segundo.
Cuatro series de 10 a 12 repeticiones dejan los hombros de Brett Becker fritos por completo.
La alimentación es la piedra angular de todo programa
Brett afirma: “Para mí la nutrición es esencial en culturismo, puesto que supone hasta el 90% del aspecto que se puede llegar a conseguir. Una buena dieta te puede construir o destruir. Los suplementos son asimismo importantes, pero sólo funcionan si la dieta es buena, porque de lo contrario servirán de muy poco”.
Antes durante la época de fuera de temporada Brett se permitía subir mucho de peso, porque seguía los sistemas clásicos y sabía que tenía que comer mucho para impulsar el crecimiento. Sin embargo, ahora ya ha adoptado otro enfoque en el que se mantiene todo el año en un peso más cercano al de competición para luego llegar a definirse más fácilmente y sin una dieta tan severa que ponga en peligro la masa muscular adquirida. Ahora sólo tiene que reducir un 10% de peso.
Su dieta se basa en grandes cantidades de proteínas y numerosas comidas durante el día.
“Es la única manera de llegar a tener el organismo en constante balance positivo de nitrógeno, para que la síntesis de proteínas puede tener lugar. Tomo muchos carbohidratos feculentos por la mañana y sólo fibrosos a partir de la tarde, pero la proteína siempre alta. También ingiero una pequeña cantidad de grasa buena y sobre todo bebo mucha agua”.
Brett consume bastante carne roja magra y pavo, así como huevos, en tanto que fuentes de proteínas. Los copos de avena, el arroz integral, los boniatos y las patatas, como hidratos de carbono y el aceite de lino, el MCT y los frutos secos como fuentes de grasas buenas. El salmón también cobra protagonismo destacado en su menú, puesto que proporciona proteínas y ácidos omega 3 a un tiempo.
Con 12-14 semanas de antelación a la fecha de una competición empieza a apretar la dieta para que los cambios sean paulatinos y graduales.
Primero aumenta el ejercicio cardiovascular, además de reducir las grasas y los carbohidratos, luego incrementa la ingestión de proteínas para compensar en parte las calorías eliminadas y conforme avanza la dieta y la definición, luego eleva de nuevo un poco los hidratos de carbono para llenar el músculo, y otra vez más las proteínas.
De hecho su objetivo es alcanzar la máxima definición antes de la fecha prevista, para que justo antes de la competición esté en una fase en la que las proteínas e hidratos estén al alza, porque así los músculos se verán más llenos y densos.
El secreto de un culturista natural
Brett sabe perfectamente que la dieta es el factor principal, después del entrenamiento, para que los músculos crezcan y muy especialmente cuando no se utilizan ayudas hormonales o químicas.
Para un culturista natural, toda ayuda que pueda mejorar la síntesis de nuevas proteínas tiene un valor incalculable. Por eso mismo es un fiel creyente y usuario de los ergocéuticos.
Las ayudas ergogénicas naturales han avanzado mucho con la creación de los ergocéuticos de Future Concepts.
La concepción de cada uno de ellos es muy meticulosa y está concebida para un objetivo concreto, para acelerar la síntesis de proteínas, para incrementar la absorción, para aumentar la producción hormonal, etcétera, por eso Brett atribuye a estos preparados gran parte de sus progresos.
Acelerar la síntesis de proteínas (anabolismo), e impedir su degradación (catabolismo)
Ya sabemos que el cuerpo necesita proteínas, carbohidratos, grasas, vitaminas, minerales y muchas otras sustancias para funcionar correctamente, pero cuando se trata de adquirir una masa magra superior eso no basta.
Por eso mismo Brett utiliza a lo largo del día el ergocéutico WP R10 de Future Concepts, porque contiene varias fuentes de proteínas altamente biológicas y de diferente ritmo de absorción, de esa forma éstas impiden el catabolismo y mantienen el balance de nitrógeno positivo a lo largo del día, o sea que potencian el anabolismo. Este ergocéutico también incluye grasas saludables y carbohidratos complejos de bajo índice glucémico.
Al mismo tiempo el WP R 10 cuenta con numerosas sustancias que favorecen la digestión, la absorción y hasta la mejor metabolización de las proteínas ingeridas, pero también otras que impiden la formación de grasa, así como elementos para aumentar la energía mental y sobre todo para elevar la producción hormonal.
Esta fórmula se consume entre horas para regular el metabolismo y mantenerlo en estado positivo de nitrógeno.
Sin embargo, después de cada sesión de entrenamiento Brett recurre al WP P11 que es una modificación del WP R10 pero adaptado específicamente para sacar provecho de las condiciones metabólicas tan particulares que se producen como consecuencia del entreno.
Es conocido que en esos momentos el cuerpo atraviesa un periodo transitorio, conocido como la ventana anabólica, en el cual se aceleran las funciones de absorción, reconstrucción y recuperación, por eso el WP P11 ha de usarse entonces, porque contiene todos los elementos óptimos para sacar el máximo de ese estado puntual. Con su empleo se acelera la construcción de tejido muscular, la formación de glucógeno, la reparación de los tejidos conjuntivos y articulares, la desintoxicación del hígado, el aumento de las hormonas anabólicas al tiempo que se impide la elevación de las catabólicas, esto último es de gran importancia porque sólo con frenar la subida del cortisol ya se da un gran paso adelante.
Ambos ergocéuticos aseguran la correcta alimentación y estabilizan la función endocrina.
Multiplicar la absorción
Mejorar la absorción puede tener más impacto sobre la ganancia de masa corporal que comer más, por eso Future Concepts ha desarrollado el único amplificador de la absorción que existe, el AB 18.
Una sola cápsula abre las puertas de la absorción metabólica durante horas. Tanta es su fuerza que está totalmente desaconsejado su empleo si se sigue medicación o se bebe alcohol, pues sus efectos equivaldrían a multiplicar las dosis.
Los componentes que forman este ergocéutico actúan en diversos frentes responsables de la absorción de las partículas a nivel de las paredes del intestino superior y del hígado. Con sólo dos cápsulas al día los progresos se notan de forma acusada.
Más fuerza y volumen por medio de la hidratación muscular
Se sabe que la hidratación permite rendir más en el deporte y por tanto es importante, sin embargo en el culturismo tiene una mayor repercusión, puesto que los músculos están compuestos en un 70% por agua, de manera que si se incrementa su hidratación es posible conseguir automáticamente un aumento considerable de la fuerza y del volumen musculares.
El CRS 086 de Future Concepts es un hidratador celular de gran eficacia porque su fórmula, desarrollada siguiendo protocolos científicos, es capaz de inundar el interior de las células musculares con agua produciendo con ello un considerable aumento del volumen y fuerza, pero además, y esto está científicamente demostrado, acelera la síntesis de proteínas dentro de la célula.
La meticulosa combinación de creatina, ribosa, taurina, glutamina, aminoácidos y electrolitos, hace que las células de los músculos absorban el agua en su interior, así como la creatina, los aminoácidos y otras sustancias, ganando con ello mucha fuerza y volumen y acelerando su desarrollo a corto y medio plazo.
Elevar la producción hormonal
La formación de nuevos tejidos necesita de un entorno hormonal propicio, que es posible mejorar bastante por medios naturales.
Las dos hormonas principales en funciones de anabolismo puro son la testosterona y la hormona del crecimiento humana.
Esta última tiene su máxima producción en el cuerpo por la noche, al poco de caer dormidos profundamente, por eso Future Concepts ha creado el GP 01 que se utiliza sólo antes de acostarse y contiene toda una serie de elementos que incrementan la secreción natural de hormona del crecimiento.
El ergocéutico GP 01 también incluye ciertas sustancias que ayudan a mantener elevados asimismo los niveles nocturnos de testosterona, por lo que con su uso se consigue extraer los máximos beneficios del reposo nocturno, un periodo altamente anabólico por excelencia.
Sin embargo, el TEST RF 05 es de uso exclusivo diurno y sus ingredientes, todos botánicos, afectan única y exclusivamente a la producción y metabolización de la testosterona, la hormona masculina.
Con este ergocéutico es posible elevar la producción diurna de ésta al tiempo que se consigue que sea más activa en el cuerpo.
“El uso de ambos ergocéuticos me ha proporcionado mucho músculo de calidad y fuerza”.
Dinamizar el metabolismo
El TH 101 es el único activador del metabolismo que existe. Sus ingredientes aportan los materiales indispensables a la formación de hormonas tiroideas, lo que permite que la glándula tiroides funcione correctamente.
Existen numerosas razones por las que el metabolismo puede ralentizarse, desde una deficiencia nutricional, dieta severa o agotamiento adrenal, y cuando eso sucede los progresos musculares decaen, así como la energía y se acumula la grasa con mayor facilidad.
Entre los compuestos que integran el TH 101 se encuentran diversas sustancias, todas naturales, que aumentan la termogénesis, es decir la producción de calor corporal, lo que conlleva un gasto calórico mayor que se obtiene de las grasas corporales de reserva.
Por tanto, con el empleo regular del TH 101 se proporciona un empujón al funcionamiento del metabolismo, cuyo regulador es la tiroides, al tiempo que se dispone de más energía para entrenar a expensas de la eliminación del tejido adiposo.
Maximizar la congestión y regeneración musculares
Todos los culturistas experimentados saben de sobras que la congestión muscular es el primer indicio de su capacidad de desarrollo. Miles han comprobado que aquellos grupos que se congestionan fácilmente siempre acaban creciendo más, y hoy conocemos la veracidad y mecánica de ese fenómeno.
Basándose en los estudios científicos más recientes, Future Concepts ha desarrollado el ergocéutico VM NOx2 con una serie de nuevos ingredientes que proporcionan unas congestiones tan brutales que parece que los músculos están a punto de hacer estallar la piel.
La excepcionalidad de este preparado es que las partículas que lo componen activan tres ejes fundamentales del crecimiento de los músculos: la circulación del óxido nítrico, la producción del factor de crecimiento similar a la insulina, el altamente anabólico IFG 1, y las células satélite del núcleo del músculo.
El resultado es que la química muscular se activa de tal manera, que entrenando duro, el crecimiento es mucho más rápido y acentuado que bajo ninguna otra circunstancia.
Deltoides asombrosos
Cuando Brett Becker ganó la categoría de peso pesado en el Junior Nationals de 2005 una de sus mejores armas fueron los hombros.
Anchos, redondos, gruesos y perfectamente dibujados en cada una de sus cabezas, sin lugar a dudas este grupo constituyó una buena baza en su favor.
Ese desarrollo tan excepcional es producto de un trabajo minucioso y suficiente, y sobre todo de la estimulación multiangular.
Si queréis llevar los hombros a una nueva dimensión, haced como Brett, dedicadle una sesión íntegra y suficientes series con ejercicios distintos, desde todos los ángulos. No os olvidéis de descansar lo suficiente y de comer en abundancia, así como de utilizar los ergocéuticos y en poco tiempo puede que vuestros hombros crezcan más de lo nunca creísteis posible.
Después de todo, si otros pueden, ¿por qué no vosotros?
Historial competitivo de Brett Becker
2001 Caveman Classic – 1º peso pesado ligero
2002 Junior Nationals – 9º peso pesado
2003 Junior Nationals – 2º peso pesado
2005 Junior Nationals – 1º peso pesado
...
