s correcto, el "post - entreno" depende del total de nutrición global del individuo.
Otro problema es, según las particularidades de cada caso, cómo se organiza el flujo de esa nutrición global.
Por ejemplo, alguien con restricción calórica y entrenamiento muy exigente (levantadores de categorías livianas próximos a competencia) es conveniente que previo al entrenamiento consuman carbos de rápido aprovechamiento como frutas o miel o según la facilidad digestiva cereales. Y las cantidades mayores de proteína después del entrenamiento (no necesariamente inmediato, pero es una buena opción)
Si uno entrena por ejemplo en la mañana, en el post entreno va a querer comer una barbaridad, pero si uno come una barbaridad al mediodía, y entrena a las 5 de la tarde, no va a sentir la misma necesidad que en el caso anterior. En particular, yo prefiero comer la barbaridad teniendo hambre que empujarme comida a la fuerza suponiendo que después la voy a precisar. La digestión es diferente.