Y mi aportación de cosas ridículas. Me los he encontrado en varios gimnasios. Estás entrenando al límite, sentadillas o press, pasándolas putas por coger algo de músculo. Entra el monitor con un gordito, y el gordito le dice: quiero una rutina para ponerme fuerte y fibrado, pero así, como ese, no me quiero poner, no me gusta... señalando el póster en la pared de Ronie Coleman posando, vascularizado con unas venas como macarrones... y tanto nosotros como el monitor pensando "tranquilo tio, que como ese SEGURO no te pones". Ni agotando las resevas nacionales de esteroides, vamos.