Robert Enke: El deceso de un deportista profesional

Robert Enke: El deceso de un deportista profesional

El mundo y no sólo del deporte, está impresionado con la inesperada muerte del guardameta alemán. Robert Enke, 32 años, se aventó a las vías del tren cerca de su domicilio en la ciudad de Hannover. En una conferencia de prensa, su esposa Teresa reveló, entre sollozos, que su esposo sufría de depresiones. Robert Enke no es el primer atleta que sufría de esta enfermedad. Pero su caso sí es uno de los pocos que termina con un fin trágico. Fitness.com te presenta un artículo sobre esta enfermedad tan común y como un buen estado de salud físico y mental puede ayudar.
Este tema es tabú en la sociedad, a pesar de que aproximadamente 121 millones de personas en el mundo padecen de depresiones según cálculos de los expertos. Sólo en Alemania son 4 millones, según la Secretaría de Salud, y 10 millones de alemanes han sufrido alguna vez de depresiones antes de cumplir los 65 años. Esta enfermedad es la razón más común en lo que respecta a la incapacidad profesional, también es la razón principal de los suicidios. Más del 10 % de las personas que se encuentran en un estado de depresión profundo, ponen fin a su vida.
Las personas depresivas se encuentran en un estado de tristeza severo y permanente. Se encierran, ya que no tienen más interés en tener contacto social. Además padecen de insomnio, estados de angustia, sentimientos de culpabilidad sin fundamento y falta de autoestima. Al enfermo le faltan estímulos para esforzarse física y mentalmente.
El origen de la derpresión es complejo y muy variado. Puede ser de origen genético o ser el resultado de estrés crónico. Pero también puede ser de origen biológico: por ejemplo, la falta de luz solar puede provocar estados depresivos. Puede ser un efecto secundario de ciertos medicamentos. Además, el abuso de drogas y alcohol, antecedentes psíquicos, como estados de angustia o fobias, pueden llevar a la depresión.
Experiencias traumáticas pueden ser otra razón para sufrir de depresiones. Al parecer este era el caso de Robert Enke. En 2006 murió su única hija de 2 años debido a un defecto del corazón congénito. Aunque su esposa reveló que Enke ya sufría desde el 2003 de depresiones. Una explicación puede ser la presión y estrés al que están sometidos los futbolistas profesionales; el hecho de ser el centro de atención del interés público, de tener que cumplir con las expectativas y sobre todo, como portero de talla internacional. En 2007 Sebastian Deisler terminó su carrera profesional, muy joven a los 27 años, jugador del Bayern y seleccionado nacional. Ocho meses después declaró públicamente la razón de aquella decisión: él también sufría de depresiones.
Una forma sana de luchar contra las depresiones es el deporte, y no exactamente la práctica del deporte como profesión. A los depresivos les falta la motivación para practicar deporte o hacer ejercicios de fitness. Durante una actividad física se segrega endorfina, conocida como la hormona de la felicidad, la cual tienen un efecto sobre el estado de ánimo. La organización profesional de rehabilitación critica la falta de interés en el deporte como medio para luchar contra depresiones.
Con medicamentos y una terapia se puede frecuentemente controlar esta enfermedad. Sin embargo como las depresiones son un tabú, resulta difícil para la persona hablar sobre su estado de ánimo y buscar ayuda profesional, ya que en el mundo profesional, y no solo del deporte, las personas depresivas son catalogadas inmediatamente como ineptas y débiles.

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