¡No acabamos de pronunciar los propósitos de la dieta que ya los estamos rempiendo

¡No acabamos de pronunciar los propósitos de la dieta que ya los estamos rempiendo

Seamos sinceros, apenas ha empezado el Año Nuevo y ya estamos rompiendo nuestros propósitos de año nuevo. Una vez caídos en la tentación, no damos marcha atrás, al contrario, comemos con más ganas. Fitness.com te propone una dieta que funciona sobre todo si no eres exactamente Miss o Mister Disciplina: ¡baja de peso sin dieta!

Claro que la dieta de fitness.com no es el remedio a todos los problemas de salud de cualquier persona. Después de todos mis intentos fallidos pensé en un programa para bajar de peso que fuera efectivo y que no me obligara a sacrificarme y tener que decir siempre “no gracias” muy a pesar de mi buen apetito. Esto es para todas las personas que reconocen que “¡la disciplina no rige exactamente mis hábitos alimenticios!
El primer paso que hay que dar es conocerse a sí mismo. Si te encanta el chocolate como a mí y te atormentas privándote de este chocolatito y de aquel otro, es obvio que la dieta, por muy prometedora que sea, no va a funcionar por mucho tiempo. Para esta afirmación no se necesitan grandes conocimientos científicos. Una vez cumplida la dieta es un hecho que la persona va a comer chocolate en cantidades industriales – y esto va a aumentar los kilos perdidos. Es por eso que mi propósito de año nuevo se basa en la flexibilidad y en un proverbio campesino: se baja de peso únicamente cuando se come menos que antes.
La única condición es obvia, se tiene que saber cuánto se comía antes. Esta es una ayuda más efectiva que un plan. Apunta lo que comes durante el día de lunes a domingo. Para la semana siguiente suprime exactamente una comida en cada día. Así se garantiza que se come menos y no pierdas el control; antes de irte a la cama apunta los alimentos que comiste en tu plan y controlate tú mismo.
La gran ventaja del control por escrito, que he bautizado patéticamente con el nombre de “la dieta Castro 2010”, es que puedes seguir llevando tu vida social a pesar de estar a dieta. Lo ideal es mantener en secreto nuestros propósitos y no decir nada a los amigos y conocidos, ya que son los primeros en hacernos ver nuestros fracasos. No vamos a tener que estar escuchando los comentarios como: “¿no que querías bajar de peso?, ¡ya estás comiendo otra vez ¡” porque nadie sabe de tu plan. Si estás retrasado en la mañana entonces no desayunes. Si por el contrario te hechaste un banquetazo en compañía de la familia entonces di a tus colegas de trabajo que tienes que trabajar durante la pausa del medio día y sáltate la comida. Si logras hacer esto, se te facilitará no solamente cumplir la dieta sino que ¡podrás ir a casa un poco más temprano! Si te invitan a comer en la noche, no digas no, simplemente no hagas una de las 3 comidas del día.
El problema principal en la “Dieta Castro” son los dulces y golosinas. Si te pones a comer golosinas no podrás bajar de peso a no ser que quemes esas calorías. Yo le llamo la regla de la glotonería, por ejemplo, una barra de chocolate significa hacer jogging al otro día, o caminar, en fin hacer alguno de tus deportes favoritos. No hay otra solución, tienes que hacer una sesión extra. ya que el deporte o movimiento rutinario no cuenta.
Parece sencillo y lo ha sido hasta ahora – me encuentro en mi tercer día de dieta- y ninguna otra se ma ha facilitado tanto como ésta. No tengo frustraciones si como un pedazo de pastel, porque sé que después lo voy a “quemar”. Mi entorno social no me pone en tensión con sus observaciones o comentarios. Y lo mejo r de todo: funciona de maravilla gracias al control exacto. Lo único que esta dieta requiere es flexibilidad pero con una disciplina rígida.
Feliz dieta – yo ya bajé dos kilos. Discución en el foro (¡No acabamos de pronunciar los propósitos de la dieta que ya los estamos rempiendo!)

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