Bueno, yo no soy monitor de gimnasio, pero puedo decirte cómo me gustan los monitores, a saber:
Educados siempre. El buenos días y una sonrisa es la mejor tarjeta de presentación. Me gusta también la simpatía, ya puestos, aunque eso se tiene o no se tiene. Si eres de naturaleza simpática, perfecto. Sino, bastará con la educación y la amabilidad. Eso, a nivel humano, que en el caso de un monitor de gimnasio y de cualquier persona que trabaja cara al público, es importantísimo.
Y me gustan los monitores que se toman muy en serio su trabajo. Es decir, me gusta ver un monitor enseñando a alguien a hacer peso muerto si es que lo está haciendo mal, en vez de estar pelando la pava con la maciza del aerobic, por ejemplo, y que está atento al tío que va a hacer press de banca por si le solicita ayuda.
Me gusta el monitor que el primer día que entras al gimnasio te pregunta tus objetivos, y te confecciona una rutina en función de esos objetivos, y no la misma rutina para todo pichipata vendida como "rutina milagro", y que se interesa por si tienes alguna lesión, y de haberla, la tiene en cuenta a la hora de enseñarte los ejercicios.
En fin, todas esas cosas que hacen de un monitor un buen profesional.
Seguro que lo haces bien. De hecho, sólo por interesarte tanto y preocuparte por tu primer día de curro ya estás demostrando que lo quieres hacer bien. En mi opinión, vas por buen camino.
Suerte con tu nueva andadura.