Digamos que el tema tiene mucho a ver con una polémica que aconteció en los años 90 en el ámbito de las empresas. "Reingeniería x operación evolutiva". Y también tiene que ver con otro tema algo más antiguo, esta vez del ámbito estadístico, llamado "factores de confusión".
Vamos al primero: en los años 90, las empresas, frente a las innovaciones tecnológicas y políticas, vieron la necesidad de mudar muchos de sus esquemas, porque iban a dejar de ser competitivas. Esta mudanza tuvo dos alternativas:
Reingenieria se considera un modelo de empresa óptimo, y se resuelve que a ese modelo final deberá ajustarse. La transición es rápida, forzada, y muchas veces requiere cambios del plantel de funcionarios.
Operación evolutiva se parte de una situación en que la empresa es viable, aunque está lejos del óptimo, y se van modificando gradualmente procedimientos y estructuras priorizando aquellas que se entienda sean causa de los mayores problemas. Este esquema se asocia al "método del gradiente conjuguado" (atención programadores) que lo que hace es en cada punto ver cuál es la dirección en que más se mejora. Comparado a que cuando el agua cae por una montaña, cae en la dirección en que la pendiente es mayor.
Ambos métodos tienen sus ventajas y desventajas. El primero en general pierde mucha información en tanto no considera algunas particularidades que justifican parte del modelo inicial, genera conflictos y muchas veces en la resolución de los conflictos la empresa pierde más de lo que gana. El otro, puede ser errático, y la resolución de algunos puntos puede llevar a callejones sin salida para otros (el agua que bajando por la montaña siguiendo en cada punto la mayor pendiente, llega a un pozo y se queda ahí aunque la montaña tenga más para bajar).
efecto confusión el ejemplo es famoso, se hizo un estudio muchos años atrás para verificar si el consumo de alcohol afectaba las vías respiratorias, para lo cual se tomaron dos grupos, uno que bebía y otro que era abstemio. Resultó que se encontraron diferencias significativas en ambos grupos y se concluyó que el alcohol afectaba la salud respiratoria. Sin embargo, analizando ambos grupos, resulto que los ue no bebían tampoco fumaban, en tanto que los que bebían sí. Y el alcohol acabó llevando las culpas del tabaco..