Velocidad y pericia: ¡es el badminton!

Velocidad y pericia: ¡es el badminton!

Es el juego que todos conocemos desde niños como el juego del gallito. ¿Un juego de niños? ¡De eso no tiene nada! El badminton requiere de velocidad, pericia e inteligencia y es muy divertido – y sobre todo sumamente agotador. Si duda el deporte ideal para mantenerse en forma.
Hay deportes tan agotadores que hasta el más ignorante espectador se percata de eso con tan solo verlo jugar. El maratón, el triatlón o el football – donde una prolongación significa tumbarse en el pasto con calambres en las pantorrillas. Por otro lado, hay otro tipo de deportes, que por haberlo jugado alguna vez la gente se hace una idea errónea de él. Este es el caso del badmiton, que casi todo mundo jugó de pequeño. Aventar el gallito, sin agresividad, de un lado a otro, el vuelo lento del gallito nos permite, sin prisas, tomar impulso y posicionarnos. ¿Asi se juega?
El badminton es todo lo contrario, se necesitan de reacciones rápidas, ser ágil para poder cambiar de dirección y moverse en cuestión de segundos por toda la cancha, en fin se está permanentemente en movimiento. Los expertos en el tema compararon una final de Wimbledon con un juego de Badminton. El resultado no dejó dudas. A pesar de que el juego de tenis duró más de dos horas, el tiempo efectivo de juego de badminton fue más largo, además de que los jugadores recorrieron un trayecto más largo – en la mitad del tiempo – la persecución del gallito no es juego de niños.

No debe faltar la diligencia
Pero aun cuando este deporte requiere de una gran habilidad para jugar pelotas cortas, de velocidad y reflejos rápidos, es posible practicarlo a cualquier edad. Marius Breuer, un practicante fanático del badminton, comenta: “ bajo una buena instrucción se puede aprender la técnica a cualquier edad”. Marius es un joven de 19 años, que hizo un año social voluntario en el Asociación Estadual de Nordrhein – Westfalen (Alemania), en donde enseñó a niños los movimientos correctos – y también como divertirse jugando badminton. Marius añade: “ un poco de esmero ayuda bastante” Si te inscribes en un club, lo practicas regularmente y observas los consejos de los entrenadores y otros expertos en el tema, puedes dominar este deporte más rápido de lo que te imaginas y contribuir además a mejorar la condición física.
Marius quien empezó a jugar a los 14 años, nos platica sobre sus experiencias: “ se necesita entender bien este deporte para lograr hacer un punto”. La condición física también juega un papel importante, pues se requiere luchar bastante físicamente para encontrar una situación favorable y ganar un punto. Cuidar la técnica no sólo proporciona diversión sino también proteje de lesiones. Marius dice al respecto: ”al igual que en el tenis, los movimientos falsos abruman el brazo, con la técnica correcta no hay riesgo de lesionarse el brazo.” Existe también el riesgo de lesionarse las piernas; hasta los deportistas profesionales tienen que correr y cambiar rápidamente de dirección.

Contra la separación de sexos

El badminton se juega tradicionalmente bajo techo y es originario de la India. Su nombre proviene de una residencia rural en Inglaterra, en donde un oficial de la época colonial lo presentó por primera vez. En cuanto al aspecto social, es un deporte de colectividad ya que se puede jugar en parejas mixtas. Los juegos mixtos son posibles ya que, el fuerte de un jugador se puede equilibrar con el punto débil del otro y así cada sexo y pareja puede dar rienda suelta a sus cualidades. El badminton es la única disciplina deportiva que se puede jugar en parejas mixtas en los Juegos Olímpicos. Por último, es el deporte ideal para la gente que se divierte corriendo detrás de un gallito y que a la vez gusta de cultivar su vida social.

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